Siempre puedes cobrar los fondos que deposites. Los utilizarás en primer lugar al apostar para cumplir los requisitos de un bono y después, utilizarás los fondos de bonos.
Cuando ganes, estas cuentas se recargarán y todas las ganancias de la parte superior se acumularán como "Ganancias pendientes". Si eliges cobrar fondos reales (depositados), renunciarás al bono y a cualquier ganancia pendiente.